EPIGRAMARIO

CARMELO LENGO

De nuevo ha llegado el tiempo de

Orar por la difícil reunificación del

Secularmente dividido Cristianismo:

Pese a esfuerzos, hoy en día,

La pretendida unidad

De toda la Cristiandad

Sigue siendo una utopía.

Aunque ante Dios, como hermanos,

Teniendo los ojos fijos,

Pues todos somos sus hijos,

Podemos darnos las manos.

Le Reunión bilateral de Peña y

Obama, fue como muchas, verborrea

Entre dos Presidentes disminuidos:

Muy triste y desangelada

Fue Reunión de Presidentes,

Que al igual que precedentes,

No nos servirá de nada.

Habrán de surgir cada día

Desgracias bilaterales;

Por un lado: criminales;

Y por otro, economía.

La explotación del débil por el

Poderoso es tan antigua, como la

Historia misma de la Humanidad:

Nada tienen de modernas,

Tendencias esclavizantes

De hombres por semejantes,

Pues vienen desde cavernas.

Nunca ha faltado vileza

Del que abusa de indigencia

O aprovecha ajena urgencia,

Para acumular riqueza.

Es muy comprensible la angustia y

Fiereza con que luchan aquí quienes

Aspiran a seguir aferrados al “hueso”:

Los que buscan ser futuros

Alcaldes y Diputados,

Andan ya desesperados,

Haciendo mil desfiguros.

Sería horrible, por supuesto,

De un trabajo honrado hacerse,

Y de dejar de enriquecerse

Con ubres del Presupuesto.