Merced a las copiosas lluvias del actual temporal, el Lago de Chapala ha podido aumentar su nivel, al grado de que ya superó el 50% de su capacidad total de almacenamiento.
Salvador y Maldonado
El temporal de lluvias de este año fue benévolo en términos generales para el Lago de Chapala y el campo de Jalisco, sobre todo por la abundante precipitación de los Huracanes “Odile” y “Simón”, aunque estos meteoros hayan también propiciado serios problemas en varias zonas urbanas.
Como ejemplos de beneficios, se constata una abundante captación de agua en presas jaliscienses, lo que repercute favorablemente en las reservas de agua para actividades agropecuarias, además de la recarga de mantos acuíferos para diversos usos, como el abasto de agua potable para el consumo humano.
Al término del primer tercio de octubre, el lago más grande del país ya había recuperado 1.15 metros (contra 85 centímetros que había logrado hace un año a la misma fecha), lo que ha aumentado su volumen en 1,142 millones de litros.
La recuperación del agua del lago, si bien ha sido mayor en otros años, es una buena noticia para quienes dependen de él para sus actividades económicas, como los restauranteros, pescadores y varios prestadores de servicios turísticos que hay en la zona de la Ribera.
Como se ha mencionado, el tiempo de aguas fue propicio para Chapala y la gran mayoría del territorio jalisciense, a pesar de que en un período de la llamada canícula hubo una reducción de la lluvia, lo que fue motivo de impacto negativo para los productores agropecuarios de algunas regiones, como los Valles del Sur del Estado y la Zona de Ameca.
Habrá que esperar el comportamiento de las lluvias durante este Otoño y el próximo Invierno para obtener el balance completo en cuanto a la recuperación del importante vaso lacustre.
Habrá más alimentos
De parte de las Autoridades del sector rural, se ha informado que vienen cosechas importantes en varios productos, como maíz (tanto blanco como un volumen importante de amarillo) y sorgo, aunque en este año juega en contra del agricultor la caída del precio internacional de ese grano básico.
Además, se avizora un buen escenario para los cultivos de Invierno (como trigo y avena), merced a los buenos niveles de almacenamiento de agua que se asegura en las presas de varias comarcas de la Entidad, lo que también es buena noticia para el sector ganadero. Y es que en este ámbito la proliferación de pastizales, la recuperación de las presas y los pequeños embalses que permiten abrevar a los animales, es un factor de importancia para los productores de diferentes clases de ganado.
Como ejemplos de presas que han quedado a más del 100 por ciento de su capacidad y que han sido, por lo mismo, motivo de monitoreo para que no haya situaciones de riesgo de desbordamientos, se encuentran Trigomil (Unión de Tula); La Vega (Teuchitlán y Ameca); El Tule (Arandas), y Cajón de Peñas (Tomatlán, la presa más grande de Jalisco), entre otras.
PARA SABER
La capacidad total de almacenamiento de la Laguna de Chapala es de casi ocho mil millones de metros cúbicos. (Un metro cúbico equivale a mil litros).
Al término del primer tercio de octubre, el lago alcanzó un almacenamiento de 50.78 de su capacidad.
En su punto más crítico, en junio pasado, el mar chapálico estuvo a un 36 por ciento de su capacidad.
Durante el reciente período de estiaje 2013-2014, perdió 90 centímetros, de los 97 que recuperó en el temporal de 2013.
La red de presas de Jalisco supone 52 embalses de mayor importancia por su tamaño, además de otras menores.
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