Sobre el asesinato del Cardenal Posadas

Presentan en Roma el Libro “Los Chacales”

Fundación Miguel Palomar y Vizcarra

El Cardenal José Francisco Robles Ortega, Arzobispo de Guadalajara, y los Abogados Jesús Becerra y Fernando Guzmán, Presidente de la Fundación Miguel Palomar y Vizcarra, presentaron en la Ciudad de Roma la versión en italiano del Libro “Los Chacales, la mafia que ordenó el asesinato del Cardenal Posadas”; acto que tuvo lugar en la Basílica de San Bartolomé, consagrada a los nuevos Mártires de los Siglos XX y XXI y que guarda un báculo del Cardenal Juan Jesús Posadas Ocampo, donado por el Arzobispo Emérito de Guadalajara, Cardenal Juan Sandoval Íñiguez, su sucesor inmediato.

Con sed de justicia

El Arzobispo de Guadalajara y Presidente de la Conferencia del Episcopado Mexicano, Cardenal Francisco Robles, dio inicio a la presentación del texto señalando: “No nos mueve ningún sentimiento, ningún deseo de venganza; es lo que menos necesitamos en nuestro país. Nos mueve únicamente el deseo de vivir en paz, de vivir hermanados, pero con base en la verdad y la justicia”. Dijo también: “A mí, como sucesor del Cardenal Posadas, me mueve el deseo de que a mi antecesor se le haga justicia, puesto que fue un hombre que luchó por ella, por la paz, por el bien de México y por amor a la Iglesia”. Añadió que es urgente saber la verdad, “no para vengarnos, sino para que nuestra pacificación y nuestra fraternidad, tengan el sólido sustento de la verdad y de la justicia”.

Un libro, una historia real

El Libro “Los Chacales” fue redactado por el Escritor, Abogado y Catedrático de la UNAM Jesús Becerra Pedrote con base en investigaciones realizadas junto a los Abogados Fernando Guzmán Pérez Peláez y Antonio Ortega. Al respecto, Becerra señaló que “hay muchos elementos que apuntan a que el asesinato fue premeditado. El General Gutiérrez Rebollo, quien estuvo al frente del operativo, y que purgó muchos años en la cárcel acusado de narcotráfico, dijo que todo el escenario para matar al Cardenal había sido un montaje, y que todo estuvo dispuesto para asesinarlo. Los motivos -continuó- podrían ser que el Cardenal Posadas conocía que había personas cercanas al Presidente y al Gabinete que estaban involucradas en el narcotráfico, y así se lo hizo saber a Carlos Salinas en una reunión que mantuvo con el Mandatario en la Residencia Oficial de Los Pinos, días antes del crimen.

“Ahora bien, lo importante es preguntarse ¿para qué lo mataron de aquella manera, públicamente, en un aeropuerto? El mensaje de la gente en el poder, señalando que ellos son los que imperan, es muy claro. Son la fuerza, matan al Prelado de manera visible para que la Iglesia y el pueblo sepan que no se pueden meter con ellos”, concluyó.

Oportunidad buena para el Jefe de la Nación

Por su parte, Fernando Guzmán, Presidente de la Fundación Miguel Palomar y Vizcarra, manifestó: “Hoy, el Presidente Peña Nieto tiene una oportunidad única de consignar todas las investigaciones realizadas desde 2002 ante un Juez competente, ya que contienen elementos suficientes para determinar alguna presunta responsabilidad en la operación del crimen”. El Abogado tapatío agregó que, “de ser así, se daría un mensaje de aliento a la Sociedad mexicana, que sufre hoy víctima de la violencia, de la delincuencia y de la injusticia, que tanto la lastiman. Si el Gobierno Federal actúa en consecuencia, daría una muestra de que ha emprendido una verdadera lucha contra la impunidad, lo cual permitiría, como ha dicho el Papa Francisco, dar paso a la concordia y la paz”.