¡Bienvenido, Papa Francisco!

El Papa Francisco en Cuba y Estados Unidos

Rebeca Ortega Camacho

Del 19 al 22 de septiembre, el Papa Francisco hará una visita apostólica a Cuba y luego a Estados Unidos, donde permanecerá hasta el día 27.
El Santo Padre será recibido el sábado 19 en el aeropuerto de La Habana por el presidente Raúl Castro, quien le ha manifestado en público su admiración. El momento principal del viaje a la Isla será la Misa del domingo en la Plaza de la Revolución, donde también celebraron la Eucaristía los Papas Juan Pablo II, en 1998, y Benedicto XVI, en 2012.
El martes 22, el Papa Francisco será recibido por el presidente Barack Obama en Washington, D.C.; el día 23, tendrán una reunión en la Casa Blanca y presidirá la Misa de Canonización de Fray Junípero Serra.
El día 24, después de dar un discurso en el Congreso, visitará el centro caritativo de la parroquia de San Patricio. A continuación, viajará a Nueva York, donde el día 25 dará un discurso en la sede de la ONU y después se desplazará a Filadelfia, donde participará en la Clausura del VIII Encuentro Mundial de las Familias.
Durante el viaje apostólico, se destacan las reuniones de gran interés humano: con los jóvenes en La Habana, los vagabundos en Washington, los inmigrantes en Nueva York y los presos en Filadelfia.
Resulta significativo el hecho de que el Sumo Pontífice visite ambos países en una misma gira, si se considera que su intervención fue decisiva para el restablecimiento de las relaciones entre ambos gobiernos.
El pasado mes de julio, el Papa escogió tres países de Sudamérica –Ecuador, Bolivia y Paraguay– para el primer viaje a su continente natal. Ahora antepone Cuba a Estados Unidos para enviar un mensaje que espolee a la reconciliación entre otros países enemigos (con información de ACI Prensa y News.Va).

Medios ambientan visita Papal a USA

Pbro. Germán Orozco Mora
Mexicali, B.C.

Desde California a Nueva York, los editores de revistas de gran calidad están prácticamente “echando la carne al asador” con motivo de la Visita del Papa Francisco a Estados Unidos, del 22 al 27 de septiembre. El ambiente y los Medios refieren en sus portadas que se trata de “el Papa de la gente”.
La Visita contempla eventos como la Canonización del misionero Franciscano Junípero Serra, fundador de la Alta California y cuya estatua de bronce se encuentra en el Capitolio de Washington, D.C.
En Nueva York., el Romano Pontífice ofrecerá un discurso en la sede de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) como lo hiciera Pablo VI, primer Papa en visitar Estados Unidos.
La última visita de un Papa a Estados Unidos tuvo lugar en abril de 2008, fecha en la que Benedicto XVI estuvo en Washington y Nueva York.

EL PAPA PABLO VI
La bien cuidada edición de una revista conmemorativa de la Visita papal de este 2015 a Estados Unidos –editada en California–, incluye las visitas comenzadas por el Papa Pablo VI, hace 50 años.
Como que todo se ha acomodado providencialmente: en 1965, el Papa Montinni, dentro del ambiente innovador del Concilio Vaticano II, visitaba Estados Unidos de Norteamérica en el contexto de movimientos civiles motivados por la Fe de hombres carismáticos y martirizados por sostener la verdad a favor del hombre y sus derechos civiles –Luther King en el Sur, Kennedy como Presidente y, en California, el católico César Chávez; éste último visitó en alguna ocasión al Papa Pablo VI en el Vaticano–.
En la memoria escrita, se conserva aquel 4 de octubre de 1965, “The Pope’s Day in the United States”. Pablo VI se encontró con miembros representantes de 117 naciones de la tierra. El primer Presidente Católico de USA había sido ejecutado un 22 de noviembre de 1963. De manera que el Papa Pablo VI fue recibido por el Presidente interino, Lindon B. Johnson, y el nombre de John F. Kennedy fue evocado como la primera persona en ser presentada al Papa por el Cardenal Richard Cushing. El Cardenal Francis Spellman, así como el Secretario General de la ONU, Dean Rusk, estuvieron presentes.
La primera Visita Papal a Estados Unidos concluyó con la santa Misa en el Estadio de los Yanquis de Nueva York, con una participación aproximada de 90 mil asistentes, y fue a las once de la noche en que el Papa fue trasladado al aeropuerto J.F. Kennedy para su retorno a Roma, que concluyó este histórico día –destaca la crónica de Bill Adler, el 4 de octubre de 1965–.

“Love is our mission”
Existen dos versiones del logo con el lema para la visita del Papa Francisco a Estados Unidos: una en inglés y otra en español. El lema en inglés es “Love is our mission. Pope Francis 2015. United States” y en español es “El amor es nuestra misión. Papa Francisco 2015. Estados Unidos de América”. Ambas frases son de color azul y el nombre del Papa está inscrito sobre un rectángulo con extremos circulares. Estados Unidos está escrito con letras de color rojo. Estos lemas aparecen al lado de una imagen blanca de contornos negros del Santo Padre, que está de espaldas y saludando. Sobre el lema y el Papa, hay un grupo de edificios.

“Misionero de la Misericordia”
El lema para acompañar la Visita del Papa Francisco a Cuba es: “Misionero de la Misericordia” y el logo oficial es un corazón dividido en dos. El lado izquierdo es de color rojo y en el centro tiene una estrella blanca, similar a la que aparece en la bandera cubana. En el lado derecho hay una mano de color amarillo extendida hacia arriba. Sobre ella, hay una cruz azul, que es el símbolo del cristianismo.

Tres Pontífices: Juan Pablo II, 1998; Benedicto XVI, 2012; Francisco, 2015
Fe y Vida en Cuba

El Papa Francisco se convertirá en el tercer Pontífice en viajar a Cuba en 17 años, donde visitará, del 19 al 22 de septiembre, La Habana, la Ciudad de Holguín, el Santuario del Cobre y la Ciudad de Santiago de Cuba.

Pbro. Germán Orozco Mora
Mexicali, B. C.

“El Milagro está en la grandeza mostrada por el Papa al recibirme. En él pude observar aprecio, un aspecto bondadoso y noble, un hombre muy respetuoso, amable, sosegado. Y fue tan amable, que me dejó hablar” (Fidel Castro, 1996. Visita a Juan Pablo II).

Bartolomé de las Casas, Fraile Dominico, fue el primero en Evangelizar Cuba, iniciaba el siglo XVI. Abandonó los planes de conquistador para convertirse en defensor de los Indios, y fue hasta 1527 que se instaló en la Isla el primer Obispo, el Dominico Fray Miguel Ramírez.

¿POR QUÉ CUBA?
Algunos periodistas, en noviembre de 1996, cuando Fidel Castro visitó a Juan Pablo II en el Vaticano, creyeron que ocurrió “un milagro”. A lo que el líder cubano insistió en que, sí había un milagro, éste era el que Juan Pablo II hubiese recibido al revolucionario caribeño.
En sus discursos ante el Papa Wojtyla, el Presidente Castro no dejó de mencionar el motivo de sus inquietudes, mismas que comparten muchos países. El castigo de bloqueo que el Imperialismo Norteamericano puso a Cuba desde 1962, bloqueo que trata de solucionarse a través del Papa Francisco, el Nobel de La Paz y Presidente de Estados Unidos, Barack Obama, con el restablecimiento de la Diplomacia USA-Cuba, a partir de 2014.
¿Por qué Cuba, siendo un país comunista marxista, sigue adelante pese a los bloqueos económicos? La respuesta es sencilla: porque no ha sido abandonado por naciones hermanas, como México, Venezuela, Rusia y China. ¿De qué se trata entonces? Eusebio Leal Spengler, historiador de La Habana y promotor restaurador de La Vieja Habana, explica cómo, a pesar de que los países aliados a la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (ex URSS) se desentendieron vía los partidos Comunistas y Bolcheviques, rompieron relaciones con las iglesias y religiones; Cuba no lo hizo en absoluto. Siguió manteniendo encuentros entre religiones e iglesias, y en especial con la Iglesia Católica Universal, particularmente con los sumos Pontífices.
Cuba siguió, como Polonia, a pesar de los nazis y soviéticos, peregrinando y venerando a la Virgen de Czestokowa o Virgen Negra; como los cubanos peregrinaron y mantuvieron su Fe a través de Nuestra Señora de la Caridad del Cobre de Santiago de Cuba.
Una amiga ucraniana (que Dios tenga en su gloria eterna) platicaba que, en su visita pastoral a Ucrania en 2001, Juan Pablo II fue abandonado “maquiavélica y groseramente” por el Patriarca de Moscú, no así por los de Kiev y Turquía, quienes lo recibieron amablemente.
Si para Cuba fue un desastre la desintegración de la URSS, la nación cubana no fue abandonada a su suerte por muchas naciones. Incluso, la Iglesia Católica y la Santa Sede mantuvieron comunicación con Cuba y sus gobiernos.
No se equivoca don Fidel Castro al advertir que muchos exagerados hablaban de la visita destructiva del Papa Polaco a Cuba, toda vez que era considerado como el “ángel exterminador” del comunismo. Y como bien dice el Ex Presidente Castro, San Juan Pablo II nunca comulgó con el comunismo que pisoteó trágicamente su patria Polonia; pero, además, siempre despreció el nazismo y sus locuras antisemitas e inhumanas. De manera que, al desmoronarse la URSS, Cuba no se hundió con el ateísmo soviético.

CATÓLICOS CUBANOS
Cuba y los cubanos, aunque no son mayoría creyentes, menos católicos, mantienen cordura y benevolencia hacia la Fe Católica; porque, como ha dicho Fidel Castro a su pueblo, retando a los mismos revolucionarios comunistas cubanos: que así como las Religiosas de la Caridad, fundadas y traídas a Cuba por la Madre Teresa de Calcuta, son un ejemplo de humanismo, Fe y caridad, así el revolucionario tiene fe en la justicia, igualdad, caridad, amor a los necesitados, y debe ser motivo de lucha. Si no lo hace por una creencia, al menos por convicción.
Cuba no sólo es un ejemplo de respeto a los valores religiosos o no religiosos. Sino que ocupa primeros lugares en cuestiones de salud. Y el prestigio de sus médicos, deportistas, profesores, etcétera, que son reconocidos mundialmente.
El historiador y erudito cubano, Eusebio Leal Spengler, considera algo providencial el hecho de que en Cuba se insiste en vivir más allá de la Fe particular, el distinguirse por la práctica de la caridad, en especial con el que tiene hambre, sed, desnudez, sin techo, presos y migrantes. A esta virtud de los cubanos, dentro y fuera de su patria, les acompaña una Fe mariana, arraigada en la aparición, en el mar, de una imagen venerada hace más de 400 años. Reconocida desde 1916 por el Papa Benedicto XV, en Nuestra Señora de la Caridad del Cobre.
Más habría que admirar de Cuba, pues el primer Obispo mexicano canonizado por Benedicto XVI, fue consagrado –debido a la persecución– Obispo de Veracruz, estando en el exilio en La Habana, Cuba, allá por los años de la década de 1930, San Rafael Guízar y Valencia.

Aprendiendo de Cuba

Pbro. Germán Orozco Mora
Mexicali, B. C.

El poeta cubano José Martí Pérez fue el heredero de las virtudes cívicas y morales del sacerdote Félix Varela y Morales, quien, a decir del Papa Juan Pablo II, fue maestro de las próximas generaciones de Cuba.
El reconocimiento actual más importante en el ámbito cultural cubano, es el Premio Félix Varela, quien se distinguió por sacrificar su vida para formar a los jóvenes en la responsabilidad personal y social, antes de la Revolución de 1959. En su visita a la Isla, en enero de 1998, San Juan Pablo II visitó el monumento del Padre Félix Varela, acompañado por el presidente Fidel Castro.
Los pueblos, las ciudades, las grandes metrópolis, conservan, como en Cuba, la memoria de Sacerdotes y Personajes Humanistas que se abnegaron por sus comunidades a través de servicios humildes.
No puede uno dejar de sorprenderse por el hecho de que el Premio Nobel de Literatura en 1954, Ernest Hemingway, regalase la medalla con la que fue condecorado, poniéndola humildemente a los pies de Nuestra Señora de la Caridad del Cobre, la Virgen María, en su Santuario de Santiago de Cuba. Amó tanto a Cuba el Nobel Norteamericano, que no sólo vivió allá, sino fue en la isla donde escribió una de sus obras inolvidables: “Por quién doblan las campanas”. Y no es considerado “católico”; como expresaba San Agustín: “Sólo Dios sabe quiénes estando dentro, están fuera; y quienes estando fuera, están dentro”, en referencia a la pertenencia a la Iglesia. Enorme gesto de Hemingway, maestro de generaciones de corresponsales, periodistas y literatos. Norteamericano de quien hay que aprender a amar a Cuba, en donde vivió muchos años, amor que le inspiró tantas reflexiones y letras.
La revista Proceso da cuenta, en su edición del 6 de septiembre de 2015, del trabajo fundamental del Papa Francisco, para que Estados Unidos y Cuba tengan un reencuentro en todos los sentidos. Esto significa en realidad la expresión Pontífice; es decir, el que hace de puente entre Dios y los hombres. Aquello que Jesús expresó en el Sermón de la Montaña: “Bienaventurados los que buscan la paz, porque serán llamados hijos de Dios”.

Al honor de los Altares
Fray Junípero Serra, Misionero de Cristo

El 23 de septiembre de 2015, a las 16.15 horas de Washington, D.C., el Papa Francisco presidirá la Ceremonia de Canonización del Beato Franciscano Junípero Serra en el Santuario Nacional de la Inmaculada Concepción, ubicado en la capital de Estados Unidos.

Pbro. Germán Orozco Mora
Mexicali, B.C.

A la memoria del inolvidable historiador
Fr. Lino Gómez Canedo, humildemente sepultado en la Misión de Tancoyol de Serra. Sierra Gorda, Querétaro.

San Junípero Serra, Fraile Franciscano, originalmente bautizado como José Miguel Serra Ferrer, vivió su lema: “Siempre adelante, sin retroceder”. En San Diego, inició las misiones de la Alta California; aquí ha sido inmortalizado de modo singular a través de Los Padres de San Diego, equipo de béisbol cuyo logo es un fraile franciscano bateando.
Inseparable de su paisano de Palma de Mallorca -Cataluña, España-, el también fraile Francisco Palou, Biógrafo del Padre Serra, vivió con él una intensa vida de sacrificios, pobreza, obediencia y entrega, plasmada desde las misiones de Jalpan, Tancoyol, Concá, etcétera.
Hacia 1767-1772, al recibir la responsabilidad de la vida misional heredada por los Padres de la Compañía de Jesús, que iniciaron con el Padre Kino, en San Bruno, con el presidio misión un 6 de octubre de 1683; después, en 1697, con el llamado “Padre de las Californias”, el milanés italiano Juan María Salvatierra, quien arribó a la Península Bajacaliforniana un 25 de octubre de 1697 para fundar la Madre de las Misiones, Nuestra Señora de Loreto. Activa y bajo el cuidado de la Diócesis de Nuestra Señora de La Paz (BCS).

SAN DIEGO DE ALCALÁ, PRIMERA MISIÓN DE ALTA CALIFORNIA
Los Padres Jesuitas iniciaron su obra misional en la Baja California, a través del Obispado de Guadalajara, vía el Puerto de San Blas, Nayarit, que no desapareció gracias a la petición del mismo Padre Serra al Virrey Bucarelli, fundamental en la Conquista y Evangelización de las Californias. Una veintena de incursiones marítimas militares alcanzaron las Bahías de Monterrey, San Francisco y el mismo San Diego. Todos estos lugares tomaron sus nombres de los conquistadores y navegantes inmortalizados, ahora en sitios como: Portolá, Cabrillo, Balboa, Coronado, De Anza, Catalanes, Portugueses, Españoles.
Algunos historiadores identifican la vida misional con expresiones como la California Jesuítica (Sur), la California Franciscana (USA) y la California Dominica (Norte). En la actualidad, conservando nombres significativos como la capital de California: Sacramento. Y cientos de lugares con nombres similares y en diminutivo como Encinitas, Los Gatos, Santa Clara, etcétera.
Si en la Península Bajacaliforniana los expedicionarios buscaban perlas y mujeres, en California andaban tras el oro. Los misioneros como Kino, Serra, Miguel Hidalgo (dominico), Salvatierra, fundaron misiones para acercarse y acercar a Dios a las personas, los aborígenes, como lo hiciera muriendo en el Río Colorado -Yuma, Arizona- el Franciscano del grupo del Padre Serra, Fray Hermenegildo Francisco Garcés, cuyos restos yacen en el Ex Convento de la Santa Cruz de Querétaro.

JUAN PABLO II BEATIFICA A FRAY JUNÍPERO EL 25 DE SEPTIEMBRE, 1987
Desde la Misión de Dolores o de San Francisco de Asís, por cierto, primer edificio público de San Francisco, California, el, hoy santo, Papa Juan Pablo II, en su visita Pastoral a los Estados Unidos de Norteamérica, celebró la Eucaristía en la que elevó a los altares al mallorquín Franciscano Junípero Serra. En esta misión-fundación, atribuida al Franciscano Palou, el inolvidable Juan Pablo II Beatificó simultáneamente a Serra y al Jesuita mexicano Miguel Agustín Pro Juárez, Mártir de la persecución religiosa en México a manos del General Plutarco Elías Calles, quien, por cierto, recibió la gracia de los Sacramentos desterrado en San Diego, California, a través de un Jesuita, según testimonio del Licenciado Armando Chávez Camacho, Periodista sonorense, autor de Copia del Juicio contra el Padre Pro (JUS), obra que demostró la inocencia del Padre Pro en su doloroso martirio por odio a la Fe de parte del Presidente Calles.
California ha sido benévola y agradecida con el Padre Serra. Un pino, de las tantas variedades que existen, lleva su nombre.
La epopeya Misional Californiana inicia en San Diego. Nombre de un seglar terciario Franciscano, originario de Alcalá de Henares. San Diego de Alcalá le nombra a esta humilde e imponente misión, que hoy es activamente parte de la Diócesis de San Diego, California. La cual, por cierto, clama por vocaciones que se integren a la Evangelización de esta urbe de millones de pobladores que, entre ellos, hablan más de 40 lenguas o idiomas.
Nunca negaron los Franciscanos, como el Santo Padre Serra, las bondades de California. Más bien, en California se dice que la pobreza de los Franciscanos se tornó en la riqueza de los habitantes. Aquí lo único que hay que hacer es trabajar para comer, dicen algunos.
Entre los cientos de distribuidores viales y freeways o autopistas entre el puente Coronado, parques de diversión, estadios de béisbol, la base naval más grande del mundo, Fray Junípero Serra fue bien escogido. Arriba de la bahía, frente al aeropuerto, se encuentra Old Town (Pueblo Viejo); ahí, por 1773, el misionero fundó, junto al Presidio Militar (Presidio Hill) -ahora Museo Serra-, lo que sería la primer misión (provisional), para luego fijarla en lo que hoy es Mission Road (Camino), donde el santo Franciscano promovió y edificó, con los californios aborígenes, el primer templo y misión de la Alta California.

“SOLAMENTE UNA VEZ”, LA CONVERSIÓN DEL TENOR JALISCIENSE
Muchas historias que mencionar sobre los Franciscanos, Misioneros y la bendita Ciudad de San Diego, California.
Al lado de los impresionantes buques de guerra estacionados o en movimiento en la Bahía en National City, San Diego, el destierro de Calles y Abelardo Rodríguez, las mansiones de la profesora en Coronado, en medio del ensordecedor ruido de vehículos que van y vienen desde El Cajón hasta La Jolla, Sur a Norte, Este Oeste; los imparables vuelos que llegan y se van, se siente y palpa, si usted quiere, la espiritualidad franciscana y cristiana, sembrada por quien será Canonizado este 23 de septiembre de 2015, en Washington, por el Papa Francisco en su visita a Cuba-USA, su décimo Viaje Internacional Pastoral.
Campanas las hay por miles desde San Diego hasta Santa Clara y San Francisco, son sencillas y están sembradas a lo largo del Camino Real andado por Serra y Palou, así como por misioneros como el mártir del Río Colorado, Fray Hermenegildo Garcés, del grupo del Padre Serra, quien evangelizó, después de Kino, los valles de Mexicali y San Luis, Sonora.
Diría Agustín Lara, cuando le compuso en Buenos Aires este canto al tenor jalisciense José Mojica (de san Gabriel), que dejó todo por seguir a Cristo: “Y cuando ese milagro realiza el prodigio de amarse, hay campanas de fiesta que cantan en el corazón”. Mojica preguntaba, al pasar por California, qué eran esos pequeños edificios blancos con campanarios sencillos; le dirían sus amigos Franciscanos que eran misiones que habían fundado, con mucho sacrificio, Religiosos como Fray Junípero Serra, que habían dejado todo por seguir al Señor.
En California, hacen falta muchos Sacerdotes y Religiosos. Tan sólo en la Arquidiócesis de Los Ángeles, la segunda ciudad con más mexicanos después de la Ciudad de México, D.F., con la Catedral más grande de América, y con más católicos que en USA y California, sigue vigente el llamado a la Evangelización, vivido a plenitud por los Franciscanos como Junípero Serra y Francisco Palou (su biógrafo), inseparable paisano y compañero.
Con Fray Junípero Serra en California, ha quedado inmortalizada la Santísima Trinidad, la Santísima Virgen María, y una multitud de Santos y Santas cuyo nombre humildemente empleó Serra y los Franciscanos para implorar su protección y auxilio.
Entre tantas remembranzas de la California Franciscana, fundada por Junípero Serra y la Orden, no hay que olvidar que, al finalizar la Segunda Guerra Mundial, hacia 1948, fue firmada en San Francisco, California, la Declaración Universal de los Derechos Humanos. Entre los participantes a la firma, se encontraba el filósofo francés Jacques Maritain, quien, hablando de Educación, sostuvo que “los Santos y los Mártires son los verdaderos educadores de la Humanidad”.
Fue precisamente desde California donde se hicieron públicas las atrocidades que cometía el Nazismo en Auschwitz, y en los campos de exterminio hitlerianos, gracias al valor de medios escritos como San Francisco Chronicle.

El Evangelizador de la Alta California

Datos
-Su entrega Evangelizadora inició en Sierra Gorda, Querétaro.
-Recibió las Misiones Jesuíticas de Baja California Sur, en 1772.
-En 1934, se inició el proceso de Beatificación.
-En 1985, fue declarado Venerable.
-El Papa Juan Pablo II lo Beatificó en 1987, en California.
-El Papa Francisco lo Canonizará el 23 de septiembre, en Washington, D.C.

BIOGRAFÍA DE FRAY JUNÍPERO SERRA

José Miguel Serra y Ferrer nació el 24 de noviembre de 1713 en la villa de Petra de Mallorca. Religioso Franciscano español. Profesó, en 1731, en el Convento de Franciscanos de Palma, donde cambió su nombre de nacimiento por el de Junípero.
Se embarcó en Cádiz hacia Nueva España, en 1749, donde estuvo en el Colegio de Misioneros de San Fernando, antes de ser enviado a la Sierra Gorda de Querétaro.
En la misión Santiago Xalpán, evangelizó Indígenas Pames durante nueve años, y luego regresó a la Ciudad de México, desde donde partió con destino a la Alta California, encabezando un grupo de 16 Frailes, en julio de 1767.
Como responsable religioso de la zona, Fray Junípero impulsó la creación de varios pueblos misión. Al momento de su muerte, el 28 de agosto de 1784, los nueve asentamientos por él establecidos acogían a unos cinco mil 800 nativos, la mayoría de ellos bautizados.
De estas poblaciones surgirían, con el paso del tiempo, las grandes ciudades de California como Los Ángeles, San Diego, San Francisco y Sacramento.
Los restos de Fray Junípero Serra yacen en la Basílica de la Misión de San Carlos en California, cerca de la localidad de Monterrey.
En Estados Unidos, es considerado uno de los “Padres de la Patria americana” y es el único personaje no norteamericano que está presente en el Capitolio de Washington, desde que, en 1931, fuera propuesto por el propio Estado de California. En 1988, San Juan Pablo II Beatificó a Fray Junípero Serra en reconocimiento a su labor evangelizadora en estas tierras durante el siglo XVIII.
Inspirados en el Padre Serra, existen los llamados “Club Serra”, un Movimiento apostólico que surge en 1934, preocupado por el crecimiento del Catolicismo en Estados Unidos, que se dedica a la promoción y acompañamiento de las vocaciones al Sacerdocio.

DETALLES DE LA MISA DE CANONIZACIÓN

• Será la primera Canonización que la Iglesia Católica lleve a cabo en suelo norteamericano.
• La Misa de Canonización del Beato Junípero Serra se realizará en el Santuario Nacional de la Inmaculada Concepción de Washington, D.C., a las 16.15 horas.
• La Basílica del Santuario de la Inmaculada Concepción es la mayor iglesia católica de Estados Unidos y una de las más grandes del mundo.
• La decisión de celebrar la Misa en ese lugar respondió al deseo de recibir al mayor número de feligreses de las 40 iglesias que componen la Arquidiócesis de Washington.
• El Papa Francisco presidirá la Misa de Canonización completamente en español.
• Se estima la presencia de por lo menos cinco mil feligreses.
• El aspirante a la nominación del Partido Republicano para las elecciones presidenciales de EE.UU. en 2016, Jeb Bush, asistirá a la Celebración Eucarística.