En lo profesional
Trato consciente y congruente a los animales
Es válido tener una mascota en casa que proporcione compañía y afecto, pero se le deben proporcionar los servicios básicos que favorezcan, a sus dueños, tener una sana convivencia con ella, lo cual conlleva una responsabilidad.
Dulce Natalia Romero Cruz
Una mascota es un animal doméstico que nos hace compañía y que se puede tener en el hogar; sin embargo, hay gente que adquiere animales salvajes o exóticos, en la mayoría de las ocasiones de manera ilegal, lo cual, además de prohibido, es poco recomendado, dado que éstos, por su propia naturaleza, no son aptos para convivir con los humanos. Es este caso, además, su manejo es muy complejo, pues requieren alimentación y trato especiales; su temperamento puede ser desconocido para nosotros; pueden ser agresivos o incluso provocarnos enfermedades, por lo que no son considerados ni tenidos como animales de compañía.
Entre las mascotas más comunes figuran los perros, los gatos, ciertas aves o roedores domésticos como los hámster, los cuyos, etc. Mas, en cualquier caso, las personas que los adquieren deben estar siempre dispuestas a cumplir con ciertos requerimientos, que involucran tiempo y dinero.
“Hay que estar alertas: una cosa es el respeto y el cuidado de los animales, y otra una sobrevaloración o un fanatismo, porque, aunque a veces ciertamente un animal puede cubrir un hueco social o emocional, tampoco debe sobrevalorarse su presencia ni ponerla por encima de la de un ser humano.”
Antes de adquirir una mascota
“Se debe considerar qué es lo que puedo, antes de qué es lo que quiero”, advirtió el Médico Veterinario Raúl Tadeo Ortiz Berriel, quien ejerce su profesión desde hace 21años, pero que desde los 15 años de edad trabajaba ya en la Veterinaria de su hermano. Nos comentó que para tener una mascota, debe tomarse en cuenta lo siguiente:
-De cuánto espacio se dispone en casa.
-Acercarse a un Médico Veterinario que proporcione asesoría técnica, sobre el tipo de mascota ideal para la familia o la persona.
-Tomar en cuenta el tiempo para dedicarle al animal. En el caso de un perro, si no se tiene tiempo suficiente para atenderlo, lo mejor sería pensar en un gato, que es más independiente, o en algunos roedores, tortugas, peces, por mencionar otras opciones.
-Si hay hijos en casa, ha de considerarse que la mascota sea la correcta, de acuerdo a la edad de los niños.
-Una vez que se determinó la mascota o la raza, debe decirse a los niños que no se trata de un juguete más, sino de un animal que requiere un tipo de trato especial; hay que enseñarlos a convivir con el animal.
El cuidado exagerado
Se han ‘humanizado’ tanto los animales, que muchos dueños pretenden verlos y tratarlos como personas. Hay quien dice: ‘A mi perro sólo le falta hablar, de tan inteligente que es’.
“Es verdad que los perros ‘son muy inteligentes’, pero hay límites que debemos entender. Es un animal que puede proporcionarnos compañía y afecto, pero no es un humano. En muchos casos se sobrevalora a la mascota porque se le deja de ver como animal y se convierte en parte de la familia, como si fuese un miembro más de ésta. En otros casos, se adopta una mascota porque no hay hijos, porque el esposo o la esposa ya fallecieron o porque la persona se queda sola y su única compañía es el animalito; pero éste jamás podrá suplir la ausencia de esas personas. Sin embargo, se llega a tener tanto afecto y se hace tanta conexión (incluso más que con un humano), que esta relación pudiera tornarse algo muy complicado”.
Por otra parte, aseveró el Veterinario que, “en cuanto a la estética, hay muchas prácticas que se realizan al gusto del dueño, como cortes de pelo en algunas razas, corte de uñas, limpieza de oídos, etc., lo cual a veces es necesario; pero en ocasiones también hay quienes exageran en estos servicios y atenciones a sus mascotas; sin embargo, hay algunas atenciones que son imprescindibles, como la desparasitación, la vacunación, la limpieza, el sacarlos a pasear, entre otras”.
Finalmente, el profesionista aconsejó: “Hay que amar y cuidar a los animales, si se tienen. Hay que atenderlos si enferman o prevenir sus enfermedades. Procuren no comprarlos; lo preferible es siempre adoptarlos; es más benéfico y más económico”.
De mitos a mitos
Decían los abuelos: “Debes tener un perro en casa, porque todo lo malo que existe en la familia lo absorben ellos”. En cierto modo, esto es verdad porque los animales son muy perceptivos. El Doctor Raúl Tadeo Ortiz afirmó que le ha tocado atender animales que, coincidentemente, padecen la misma enfermedad que sus dueños”.
Aseguró que hay muchos casos en que los animales nos ayudan a superar situaciones difíciles, e incluso sirven para aliviar males fisiológicos, como es el caso de la zooterapia (con delfines, caballos). Por ejemplo, los perros de raza “Chihuahua” en cierta forma ayudan a mitigar el asma, porque tienen una temperatura de 39º, más alta que la del ser humano, y como se trata de una mascota pequeña, suele querer que la abracen todo el tiempo, y ese calor que emiten hace que se caliente el pecho de su dueño, evitando un enfriamiento que puede provocar un ataque de asma o respiratorio.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario