Daniel León Cueva
Obviamente, en éstos y próximos días, el foco de atención deportiva en una buena parte del planeta se centrará en el desarrollo del Campeonato Mundial de Futbol, a verificarse en Brasil, y en el cual nuestro país estará representado, otra vez con una carga de ilusiones y sueños fabricados.
Mientras tanto, en el país se despliegan las competencias de las Olimpíadas Nacionales a nivel juvenil amateur que, consecutivamente, en los últimos 14 años le han dado la supremacía a la representación de Jalisco por su mayor cúmulo de Puntos y de Medallas en prácticamente todas las disciplinas en juego.
Honra y prez de nuestro Estado son los adolescentes y jovencitos que han cosechado tantos triunfos, lo mismo en la rama femenil que en la varonil. Y no sólo son dignos de presumir sus más altos logros deportivos, sino lo que ello presupone: el apoyo y acompañamiento de sus padres, hermanos y demás familiares; su individual empeño en no descuidar sus estudios ni el régimen de cuidados personales, físicos y mentales; el respaldo de sus maestros y compañeros de escuela; la exigencia y atingencia en la enseñanza de sus entrenadores…
¿Por qué se concentra y privilegia la mirada masiva hacia los deportes escandalosamente remunerados?
Ojalá estos chicos, que ponen en alto su potencialidad, sus miras de superación y su sano crecimiento, nunca pierdan el paso; le den peso a sus altos valores y piso a sus ideales.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario