EPIGRAMARIO

CARMELO LENGO

Resulta cada vez más increíble

E hipócrita el discurso político

De falsos redentores del pueblo:

Eso de a pobres salvar

De injusticia y tiranías,

Son puras hipocresías

De quienes buscan medrar.

De “indignación” están llenos,

Pero aferrados al “hueso”;

No sueltan siquiera un peso,

De sus sueldazos obscenos.

Semejantes a ésos, son los heroicos

Tutores de derechos de minorías, que

Sólo protegen sus intereses personales:

Y estos fieros defensores

Del Derecho, o regalías

De anómalas minorías,

Son los farsantes peores.

Pues lo que buscan los pillos

Es brincar de puesto en puesto,

Viviendo del Presupuesto,

Y colmarse los bolsillos.

Se sigue confundiendo aquí el buen

Gobierno con reparto paternalista

De billetes, subsidios, despensas, etc:

Debe, orden y justicia,

Un Gobierno procurar,

Y bienes administrar,

Sin corrupción ni malicia.

Mas, ahora como antes,

Con dinero repartiendo,

Piensan estar cumpliendo

Su labor los gobernantes.

Garantiza Gobierno, que producto

Del alza de impuestos beneficiará

A muchas familias de todo México:

Lo que se va a recaudar

Con el alza en el impuesto,

Será a favor, por supuesto,

Del bolsillo familiar.

Sobre todo, afirman críticos,

Tal beneficio tendrán,

De Sonora a Yucatán,

Las familias de políticos.