“Viene a rezar a La Guadalupana”

Importantes, las prioridades
El Papa Francisco viene a México a rezar con nosotros

Al igual que ocurre los días de Audiencia Pública en la Plaza de San Pedro (foto), pero seguramente con mucha mayor expectación y algarabía, el Sumo Pontífice Francisco será recibido y aclamado en todos los lugares que recorra de nuestra geografía nacional, en febrero venidero.

Pbro. Carlos Javier Díaz Vega

Ésta será su cuarta peregrinación a América Latina, después de haber visitado Brasil en su primera gira; Ecuador, Paraguay y Bolivia en su segundo periplo y, más recientemente, Cuba, con extensión a Estados Unidos. México, después de las cinco visitas del Papa San Juan Pablo II y la de Benedicto XVI, recibirá al tercer Papa en su Historia, en el que será el séptimo viaje de un Sumo Pontífice a nuestra Patria.
Cabe resaltar que todas las salidas de los Papas presuponen unas motivaciones; es decir, un porqué y un para qué.
Recordando la breve estancia del Papa Benedicto en León en 2012, es necesario decir que los motivos de esa venida eran muchos, entre los cuales, el Bicentenario de la Independencia de los Pueblos Americanos; el gran deseo de los mexicanos de hospedar al Sucesor de Pedro; los 20 años de la reanudación de las relaciones diplomáticas entre México y la Santa Sede. Sin embargo, debe añadirse cierto tono de trascendencia a ese desplazamiento al “corazón del Continente Americano”: se trataba de animar la Esperanza de los mexicanos; pueblo de inmensos recursos y posibilidades, pero trabado por gravísimos problemas, comenzando por el drama de la violencia.

En sus casi tres años de Pontificado, el Papa Francisco ha podido dialogar con muchos mexicanos, tanto Eclesiásticos como Laicos, principalmente en la Santa Sede. La foto muestra el saludo de Pepe Prado, un reconocido Seglar Evangelizador, invitado como Observador en la primera etapa del Sínodo sobre la Familia.

El entorno religioso y mariano
Sin duda que el Vicario de Cristo se encontrará con los alegres mexicanos que participarán en las celebraciones litúrgicas programadas; con aquellos que lo vitorearán delirantes a su paso por las calles. También encontrará a tantos niños y jóvenes que tienen gran ilusión en el futuro; a los enfermos, a los migrantes y sus familias, a los que padecen en el alma diversas dificultades. Pero no olvidemos que, de sus mismos labios, escuchamos una razón muy importante para venir a nuestra Nación.
Fue el reciente 12 de diciembre de 2015 cuando el propio Patriarca de la Iglesia Universal anunció en El Vaticano su peregrinación y visita a nuestro suelo. Lo hizo durante su homilía en la Misa celebrada en honor de la Virgen María bajo el título entrañable de Nuestra Señora de Guadalupe, en el marco ya del Jubileo de la Misericordia. Con sutil voz, confió “todo el Continente Americano” a La Guadalupana: «Que nos convirtamos en misericordiosos y que las comunidades cristianas sepan ser oasis y fuentes de Misericordia, testigos de una Caridad que no admite exclusiones. Para pedirle esto de manera fuerte, viajaré para venerarla en su Santuario el próximo 13 de febrero. Allí pediré todo esto para toda América, de la cual es especialmente Madre. A Ella le suplico que guíe los pasos de su pueblo americano, pueblo peregrino que busca a la Madre de Misericordia y solamente le pide una cosa: que le muestre a su Hijo Jesús», concluyó el Romano Pontífice.
Exactamente un año antes, el 12 de diciembre de 2014, había orado a la Virgen de Guadalupe en los siguientes términos: «Hoy nos sentimos movidos a pedir una Gracia, la Gracia tan cristiana de que el futuro de América Latina sea forjado por los pobres y los que sufren, por los humildes, por los que tienen hambre y sed de justicia, por los compasivos, por los de corazón limpio, por los que trabajan por la paz, por los perseguidos a causa del nombre de Cristo, “porque de ellos es el Reino de los Cielos”. Sea la Gracia de ser forjados por ellos, a los cuales, hoy día, el sistema idolátrico de la cultura del descarte los relega a la categoría de esclavos, de objetos de aprovechamiento o simplemente desperdicio».
Ambas oraciones son hermosas, son profundas, son comprometedoras, son luz, son esperanza, son fuerza…
Queda muy claro, entonces, que el Obispo de Roma viene especialmente a México a rezar por nosotros y a rezar con nosotros. Nos preparamos, pues, a su llegada y estancia en nuestro territorio, considerando sus motivaciones y la intención de sus oraciones.

Situaciones para reflexionar
El amor misericordioso de Dios hacia México

La Visita del Santo Padre al país acaece en un momento de Gracia, como lo es el Año Jubilar de la Misericordia. Por eso nos ponemos a recapacitar sobre tres puntos importantes, como lo es la familia, el laicado y las periferias existenciales.

Dulce Natalia Romero Cruz
México, D.F.

El Papa Francisco pisará el Centro de nuestra Nación el 12 de febrero. Llegará a tierras mexicanas en un período de crisis, en el que todas las periferias, como él las llama, existenciales, emocionales, económicas y sociales, están presentes. Ante esta situación, Monseñor Eugenio Andrés Lira Rugarcía, Obispo Auxiliar de Puebla, Secretario General de la Conferencia del Episcopado Mexicano, CEM, y Encargado de la Visita de Su Santidad, nos comentó acerca de lo agradecidos que debemos estar: “Dios, en su Providencia, sabe lo que permite y cuándo lo hace. En este sentido, yo creo que no es casualidad, sino algo que forma parte del Plan Divino, que el Año de la Misericordia, para México, tenga la dicha de estar profundizado por la Visita del Papa Francisco. Él ha señalado con mucha razón, siguiendo lo que Dios le ha regalado a través de la Sagrada Escritura y la tradición de la Iglesia, que la esencia del Padre es su Misericordia; es decir, ese amor gratuito, generoso, siempre fiel, dispuesto al perdón”.

Las periferias
Y recuerda: “En su Encíclica La Alegría del Evangelio (Evangelii Gaudium), el Papa propone una reflexión muy bonita, que dice que cuando uno se ha encontrado con ese amor que le ha transformado la vida, necesariamente siente que debe transmitir esta alegría a los demás, y por eso es que todo cristiano debe ser discípulo y misionero de Cristo; es decir, un amigo de Él. Si nosotros hemos descubierto ese amor que nos ha llenado y entendemos que el Señor ama a todos y quiere compartir esta alegría a los demás, tenemos que ser Misioneros de la Misericordia Divina.
“Es por eso que el Papa nos pide que desbordemos este amor llegando a las periferias, no solamente geográficas y económicas, sino también a las ideológicas, culturales y existenciales. Se trata de que el discípulo-misionero de Jesús lo sea ahí donde está, empezando por su propia familia. Porque hoy las periferias comienzan en el propio hogar y nuestro alrededor, y tratar de ir ahí a comunicar la alegría del Evangelio, que es Jesús. Por eso el Papa nos pide como Lema de este año ‘Misericordiosos como el Padre’”.

Laicos
En la Misa multitudinaria en Ecatepec de Morelos, Estado de México, se escogió el Tema de Aparecida, que nos ha invitado a una Misión Continental Permanente, recordando que uno de los grandes protagonistas entonces fue el Cardenal Jorge Mario Bergoglio, Arzobispo de Buenos Aires, ahora Papa Francisco: “El Tema elegido para Ecatepec es la Misión Permanente, pero se le ha querido dar el enfoque del protagonismo de los Laicos. Todos los bautizados somos Iglesia y, como ha recordado el Papa, la inmensa mayoría de la Iglesia son Laicos, a cuyo servicio estamos la minoría, que somos los consagrados (Sacerdotes, Diáconos, Obispos, Religiosos). De ahí que es importante que los Laicos tengan presente que las Palabras de Jesús sean llevadas y anunciadas, empezando por nuestro propio ambiente donde nos desenvolvemos (la casa, la escuela, el trabajo, los vecinos) y llegando a las periferias también geográficas, económicas, ideológicas, culturales y existenciales”. El encuentro en Ecatepec será con poco más de 300 mil personas, y tiene el objetivo de animar a todos a comprometerse con la Misión Permanente, que nos llama a todos.

Participantes
Se ha tenido muy en cuenta que la Visita del Papa Francisco es a México como país, aunque tiene que llegar a lugares muy concretos, como a la Arquidiócesis Primada; a la Diócesis de Ecatepec, en el Estado de México; a las Diócesis de Chiapas: Tuxtla Gutiérrez y San Cristóbal Las Casas; a la Arquidiócesis de Morelia, en Michoacán, y a la Diócesis de Ciudad Juárez, en Chihuahua. Por eso es que desde el principio se ha señalado que habrá una distribución equitativa de boletos entre todas las Arquidiócesis y Diócesis de México. Ante ello, Mons. Lira Rugarcía, aclaró: “Se tomará en cuenta la sugerencia de la Diócesis anfitriona, de la Provincia Eclesiástica a la que pertenezca, y de la Comisión o División Episcopal que esté involucrada, ya sea de la Misa o del Encuentro que vaya a llevarse a cabo. La propuesta se presentará al Consejo de Presidencia de la CEM, que determinará la forma de lograr una distribución lo más equitativa posible.
“En esta distribución se tomará en cuenta el número de habitantes de la Diócesis, de católicos, de personas consagradas, Diáconos y Seminaristas, además de la cercanía a los eventos; esto es, la ubicación geográfica.
“A cada Obispo, como cabeza de su Diócesis, corresponderá la decisión de cómo distribuirá los boletos una vez que se le informe cuántos tendrán, y que son totalmente gratuitos. No habrá taquillas ni los encontrarán en ningún tipo de puestos, ni en paquetes de Agencias de Viajes”.

Conciencia muy definida
Si faltan los indígenas, le falta algo a la Iglesia

En Tuxtla y en San Cristóbal Las Casas, los pobladores están entusiasmados con la Visita del Papa. Aunque no se puede ocultar la realidad de pobreza y marginación, esperan el Mensaje del Santo Padre con esperanza, pues saben que reiterará el lugar de los indígenas en la gran Familia de Dios.

Sonia Gabriela Ceja Ramírez
Tuxtla Gutiérrez, Chis.

La Iglesia de San Cristóbal Las Casas ve como una caricia para los indígenas la Visita del Papa Francisco a tierras chiapanecas, afirma Mons. Felipe Arizmendi Esquivel, Obispo de esa Diócesis.
“Lo vemos como una señal del Amor que Dios y la Iglesia tienen para los indígenas. Sentimos que, de esta manera, el Papa quiere decirles: ‘Ustedes son parte importante y tienen un lugar dentro de la Iglesia’. El Papa quiere resaltar la necesidad de su presencia para que la Iglesia en verdad sea católica”.
La Diócesis de San Cristóbal fue fundada en 1539. El primer Obispo efectivo fue Fray Bartolomé de las Casas, quien estuvo menos de un año porque después se fue a trabajar a las Cortes Españolas y a las Universidades para defender los derechos de los indígenas.
Por cierto, a principios del Siglo XX, otro de los grandes Obispos benefactores de aquella Región fue Don Francisco Orozco y Jiménez, luego Arzobispo de Guadalajara.
“Siendo esta Diócesis mayoritariamente indígena (de 2 millones de habitantes, el 75% es autóctono), no podemos menos que estar atendiendo a sus culturas, a su historia, a sus necesidades”.
Ante algunos rituales que realizan las etnias como parte de la vivencia de su espiritualidad y que pudieran resultar extraños para quienes no estamos habituados a este tipo de manifestaciones, el Obispo afirmó: “La Fe no es algo extraño, es algo que ellos arropan en su propia cultura. Toma estilos, formas, maneras, en la propia forma de ser de nuestros pueblos. Procuramos darles sumo respeto, aunque a veces no ha faltado quién menosprecie sus signos como si fuesen superstición o magia; pero cuando uno conoce el corazón de estos pueblos, vemos con mucho respeto la manera en que ellos expresan su Fe. Hemos descubierto la manera en cómo el Espíritu Santo hace que estas comunidades hagan suya la Fe”.
El Sumo Pontífice tiene suficiente información sobre la Iglesia chiapaneca. “Los Obispos y el mismo pueblo le expusimos la realidad de marginación, pobreza, analfabetismo, que todavía hay; de problemas para acceder a los servicios de salud; pero conoce también cómo nuestros pueblos van evolucionando mucho y están enfrentándose a la cultura moderna y la van asumiendo, algunos acríticamente, otros no, sin perder sus propios valores.
“Estamos haciendo mucha oración e impartiendo Catequesis para que el contenido de lo que el Papa nos diga, nos llegue con más fuerza. Al finalizar el Mensaje del Papa Francisco se hará un breve resumen en tzotzil y tzeltal, que son los idiomas más hablados en la Región”.

CINCO IDIOMAS PRINCIPALES, Y NÚMERO APROXIMADO DE HABLANTES:
Tzeltal, 500 mil
Tzotzil, 350 mil
Chol, 150 mil
Tojolabal, 55 mil
Zoque, 25 mil

La Iglesia de Tuxtla ansía escucharle

La Diócesis de Tuxtla espera al Papa Francisco con un corazón agradecido, pues para ellos el anuncio de este encuentro ha sido un regalo divino. “Dios nos manifiesta su sonrisa y su cariño a través de esta Visita”, afirmó Monseñor Fabio Martínez Castillo, Arzobispo de Tuxtla.
“Le esperamos con una actitud de esperanza porque somos un pueblo que necesita despertar y fortalecer muchas cosas. Vemos esta Visita del Papa con una actitud de esperanza, sabiendo que Dios quiere decirnos algo y estamos ansiosos de escucharle. Le esperamos también con una actitud de compromiso; es decir, tenemos que renovar nuestras actitudes para transformar nuestra Sociedad desde las familias, con la revolución de la ternura”.
Respecto a lo que encontrará el Vicario de Cristo, el Arzobispo comentó: “Somos un pueblo con muchas carencias, con mucha pobreza, pero también somos una Arquidiócesis animosa de hacer un mejor camino. Estamos empeñados en fortalecer nuestro caminar en la comunión, en unir esfuerzos Sacerdotes, Religiosos, Religiosas y Laicos; estamos empeñados en potencializar a la Familia, y qué bueno que viene el Papa a motivarnos.
“Tenemos problemas como la pobreza, la injusticia, las deficiencias en la educación; algunos problemas de caciquismos en ciertas áreas; problemas de Poder, pero podemos decir que, ante las expectativas, las esperanzas y la disponibilidad del pueblo, esos problemas son pequeños”.

QUIENES CREEN DIFERENTE
En una Arquidiócesis donde proliferan las sectas y que existe presencia incluso de otras Religiones formales, Mons. Fabio espera que los fieles demuestren el orgullo de ser católicos durante la Visita Apostólica del Santo Padre: “El orgullo de creer en Jesús, que nos invita a ser más coherentes. Tenemos que ser cristianos de calidad, al estilo de Jesús, para que las cosas vayan mejor. Me parece que el contagio que tenemos que hacer con los otros es nuestra vida de fraternidad, de justicia, y entonces estaremos avanzando en una actitud misionera”.
Finalmente, el Arzobispo deseó a todo México que la Familia sea nuestro tesoro y nuestra tarea de cada día.

Algunas de las frases que ya ensaya Tuxtla para recibir al Papa, son: “Francisco, Papa amigo, somos familia contigo”. “Francisco, Papa amigo, Chiapas está contigo”. “Francisco, contigo somos Iglesia, contigo somos Familia”.

MONS. JOSÉ LUIS
MENDOZA CORZO,
OBISPO AUXILIAR DE TUXTLA

“Para nosotros es una Bendición y una Gracia. En 1990 vivimos la dicha de tener al ahora Santo Juan Pablo II, y ahora al Papa Francisco. Nos estamos preparando con mucha oración.
“En Chiapas estamos trabajando principalmente con las familias y los jóvenes, y esta Visita va a fortalecernos para que dejemos un poco la pasividad y la indiferencia; tenemos que esforzarnos por dinamizar a la familia”.
El Obispo enfatizó que los boletos son gratuitos.

“Es una alegría poder cocinar para el Papa”

María Socorro Arizmendi Esquivel, hermana del Obispo Felipe, de San Cristóbal Las Casas, ha recibido una encomienda muy especial para la Visita Papal: preparar los alimentos que el Santo Padre compartirá en la Catedral con 8 indígenas.
El jueves 14 de enero pasó la prueba de fuego, pues una Delegación Vaticana visitó la casa del Obispo para degustar el menú previsto, y sugerido por los encargados del protocolo: arroz blanco, y pollo o carne de res, asada; sin embargo, doña Socorro fue intrépida y cocinó un guisado de pollo con champiñones que agradó a la comitiva y que fue aprobado para ser servido al Santo Padre durante su visita a San Cristóbal.
En entrevista, doña Socorro manifestó su alegría de cocinar para tan ilustre visitante.

65 años que no han sido fáciles

Rósemberg Juárez Robles y María Antonia Vázquez Sánchez llevan 65 años de casados, y el martes 15 de febrero estarán frente al Papa Francisco para darle su testimonio de vida matrimonial y entregarle el Bastón de Mando, pues ellos pertenecen a la etnia zoque.
Don Rósemberg reconoce que en estas más de seis décadas no todo ha sido miel sobre hojuelas, pues hay momentos alegres como también los hay de tristeza o de desesperación.
Ellos tienen seis hijos: cuatro hombres, uno de ellos Sacerdote, y dos mujeres.
“Nosotros estaremos frente al Papa representando a la cultura zoque, y le entregaremos el Bastón de Mando mediante el que reconocemos al Papa como líder universal de la Iglesia, el que nos guía”, refirió el señor Juárez.
Doña Antonia, por su parte, estará entregando al Papa una corona, hecha de flores naturales, que simboliza la felicidad.
“Para ser franco, no pensamos en otra cosa que no sea el que llegue ese momento. No nos sentimos merecedores de vivir ese maravilloso momento. Admiramos su nobleza, su sinceridad, su grandeza como ser humano, y pensar en tenerlo enfrente es algo muy grande”.
Para Doña Antonia, estar cerca de Su Santidad, más allá de una ilusión, es un compromiso: “Si el Señor ha puesto su mirada en esta pareja, es porque nos ama; así lo siento yo”.
El matrimonio Juárez Vázquez dijo no tener un secreto para un matrimonio duradero o un consejo para las familias que recién se fundan; simplemente, “pedirles que, cuando vayan a casarse, estén convencidos de que se aman, porque el desarrollo de la unidad del matrimonio significa poner en práctica lo que se hizo en el noviazgo y tener la esperanza de dirigir dignamente a una familia”.

La Juventud: alegría para las familias y para la Iglesia

Manuel Morales Montoya, un adolescente de 14 años, es cuadrapléjico, está en una silla de ruedas, pero eso no lo desanima para ser un chico lleno de ilusiones y de metas. Participa en la Pastoral Juvenil de la Diócesis de Tuxtla, y el próximo 15 de febrero, junto con su familia, presentará su testimonio al Papa.
Manuel dice sentirse contento por ver al Santo Padre. “Es Papá Dios quien está adentro de él, y verlo por primera vez es una emoción que no se puede describir”.
El muchacho invitó a otros chavos a acercarse a la Iglesia y contagiar a su familia la alegría de acercarse a Cristo. Para su familia, es una gran bendición haber sido elegida, junto con Manuel, para presentar su testimonio frente al Romano Pontífice.
“Vamos a acompañar a Manuel a dirigir un mensaje a los adolescentes, con mucha alegría y mucha emoción, y tendremos la oportunidad de estar muy cerca del Santo Padre”, aseguró el padre de familia, quien además es Coordinador Parroquial en la Parroquia Inmaculada Concepción, en Tuxtla.
Por su parte, la señora María de Jesús, madre de Manuel y de otros cuatro hijos, refiere que no es tan difícil educar a cinco hijos, el mayor, de 22, y la más pequeña, de 3.
La familia considera que Manuel es un ángel enviado de Dios. Es la manera en que ellos reconocen que Dios los tomó en cuenta como una familia especial, ya que Manuel los ha acercado a Dios. Sus hermanos afirman que la principal característica de Manuel es la alegría, pues, dicen, su discapacidad no lo limita para ser un chico normal.

A través de la música

Guillermo de Jesús y Armando García Morales pertenecen al Ministerio “Fuego Nuevo”, de la Arquidiócesis de Tuxtla, que lleva cerca de 30 años tocando, y que entonará el Himno “Bienvenido, amigo Francisco”, que compusieron junto al cantautor Marco López.
Comparten que es una gran alegría cantar frente al Papa: “Nos viene a llenar de Fe, a hacernos sentir orgullosos de nuestra Iglesia Católica y a estar agradecidos con Dios por todas las maravillas que Él nos manda”.
El Himno puede encontrarse en YouTube como “Himno Papa Francisco en Chiapas”.