jueves, 14 de enero de 2016

Año Jubilar del Seminario Auxiliar de Totatiche

Un siglo de frutos silvestres

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José de Jesús González Rosas, 2º de Teología

Durante el ciclo escolar antepasado tuve la dicha de prestar mi Año de Servicio Pastoral en el Seminario Diocesano Menor Auxiliar de Nuestra Señora de Guadalupe, en Totatiche, Jalisco, una tierra marcada por el testimonio de grandes Pastores, como lo fueron San Cristóbal Magallanes Jara, San Agustín Caloca Cortés y el primer Obispo de Acapulco, Don José Pilar Quezada Valdés, sólo por mencionar algunos.
En virtud de los ya próximos 100 años de tan importante centro de formación en nuestra Arquidiócesis de Guadalajara, comparto algunas líneas breves sobre la Historia de esta Institución, que inició de manera formal el 20 de noviembre de 1916.

Antecedentes
El Seminario de Totatiche tuvo sus inicios en 1915, tras el cierre, por parte de los constitucionalistas, del Seminario Menor de Colotlán, Jal. (Diócesis de Zacatecas), en abril de 1914. El quinto Arzobispo Metropolitano, Don Francisco Orozco y Jiménez, estaba desterrado en EE.UU., y ante la crisis, el Canónigo D. Manuel Alvarado solicitó a los Párrocos atender a los Seminaristas, entonces dispersos. La respectiva Carta- Circular se dio a conocer en marzo de 1915.
Originarios de la Parroquia de Totatiche, estando en el ya clausurado Seminario de Colotlán, habían iniciado sus estudios tres alumnos: Ángel Pinedo, José Pilar Quezada y Pedro Núñez.
Así surgió la “Familia Silvestre” (seudónimo del Seminario para proteger su identidad). El señor Cura Cristóbal Magallanes buscaba ofrecerles instrucción a los alumnos o procurar a algún Sacerdote amigo suyo para tal labor; pero, al iniciar la Revolución Constitucionalista con mayor fuerza, el trabajo se redujo sólo al acompañamiento de los muchachos por las diferentes rancherías de la población.
Con un poco de paz, y al ver la situación en que se encontraban sus familias, dejaron los estudios Ángel Pinedo y Pedro Núñez, quedando únicamente José Pilar Quezada. El día 1º de junio de 1915 comenzó su formación más especial como Seminarista con el Padre Alejo Anaya, quien estaba prestando su servicio en la comunidad del Salitre de Guadalupe (hoy Villa Guerrero). Tras unas vacaciones breves, se reanudaron los estudios ya con nueve alumnos más.

Crisis
Tras pedir varios apoyos, y todos sin éxito, el Padre Cristóbal vio que las ayudas que tenía las iba perdiendo poco a poco. El Seminario iniciaba curso con 17 alumnos; el Padre Maximino Jara falleció el 20 de junio; el Teólogo Herrera se enfermó de Tifus, mismo mal que contrajo el Padre Valdés; el joven Herrera pasaría a Castroville, Texas… Parecía que la naciente obra iba al fracaso.

Fundación
Cuando todo parecía perdido, el 20 de noviembre de 1916, a las 16 horas, llegó al Curato de la Parroquia de Totatiche el Arzobispo Orozco y Jiménez, quien regresó del destierro por la parte Norte. El Padre Magallanes se encontraba en Atolinga, por la visita del Obispo de Zacatecas.
A su regreso, encontró al Prelado, le presentó a los “inquilinos del Silvestre” y le enteró de las peripecias que sorteaban. El Arzobispo le prometió que enviaría Profesores. Así, se nombró como Encargado de los estudiantes a los Padres José Mariano Garibi Rivera y Jesús Angulo, y al Subdiácono Dámaso Quintana.
Por petición del señor Cura Magallanes Jara, la Fundación del Seminario sería el 20 de noviembre de 1916.

El Silvestre
El Seminario carecía de un lugar fijo; los Seminaristas vivían en casas y se reunían en las huertas. Daba principio una incipiente persecución, la cual amainó en 1917. Para no dar lugar a sospechas, se levantó una finca, piedra sobre piedra, sin pulimento alguno, sin forma de Capilla o Templo, donde residirían los alumnos y tomarían sus clases.

Nueva Persecución
Luego de iniciarse la Persecución Religiosa, el Seminario Auxiliar comenzó una etapa de itinerancia. Por ejemplo, existen datos de la presencia del Seminario en poblaciones como Cocuasco, donde, ya ordenado Presbítero, el Padre Agustín Caloca tenía un Grupo de Humanidades; el Padre Magallanes atendía un Grupo de Secundaria cerca de La Cementera.
Martirio de San Cristóbal Magallanes y San Agustín Caloca
El 21 de mayo de 1927, fueron apresados el Párroco y el Vicario de Totatiche, y después trasladados a Colotlán para fusilarlos sin juicio alguno. El señor Cura escribía escribió en la celda de prisión “(…) Silvestre cierra la obra, paga a los albañiles, despide a los peones (…)”. Ambos fueron fusilados el 25 de mayo en el antiguo Palacio Municipal.

Reapertura
Terminada la Persecución Religiosa, volvieron a reunirse los alumnos, y se habilitó, para recibirlos, un cuarto en el antiguo Colegio Parroquial de Nuestra Señora de Guadalupe. El número de Seminaristas iba creciendo y fue menester ocupar como Casa del Seminario, ya como Internado, el Colegio Parroquial, a partir del 1º de noviembre de 1938, siendo Prefecto de Disciplina el Padre Teodoro Ríos Cárdenas, y Director Espiritual el señor Cura Pilar Quezada, Párroco de Totatiche, contando con 39 discípulos.

La nueva casa
Por insuficiente el Colegio antiguo, fue necesario hacer una nueva Casa para albergar al Seminario. Se proponía trasladarlo a Temastián, o que se construyera cerca de la Casa del “Silvestre”. El primer interesado fue el ya Emérito Quezada Valdés, primer Obispo de Acapulco y de los primeros alumnos del Seminario de Totatiche; él organizó una colecta entre los Párrocos y el pueblo. Se decidió construirla en una colonia nueva en 1984, a la entrada del pueblo, detrás del Cementerio, y se terminó y habitó en 1986.
Actualmente cuenta con 97 Seminaristas de Secundaria. Su Prefecto: el Pbro. Víctor Antonio David Íñiguez, y Padre Espiritual: el Pbro. José Luis López Tinajero.

Algunos de los alumnos destacados:
San Agustín Caloca Cortés
Siervo de Dios, Excmo. Sr. Obispo José Pilar Quezada Valdés
Pbro. José Rodríguez
Canónigo Ángel Valdés Huerta
Pbro. Nicolás Valdés Huerta
Monseñor Ramiro Valdés Sánchez
Monseñor David Orozco Loera
Canónigo José Pilar Valdés Ríos
Lic. Agustín Sánchez
Lic. Pedro Caloca Cortés
Dr. Maurilio Montañez
Dr. Regino de Jesús Ureña
Escritor y Periodista Luis Sandoval Godoy
Regidor y Diputado Rafael Sánchez Pérez, entre otros.

Trascendencia
Varios de los Formadores actuales del Seminario de Guadalajara han prestado sus servicios en tan insigne Casa, ya sea en Año de Servicio Pastoral (antes llamado Año de Magisterio), o como Diáconos, e incluso como Formadores, bien fueran Prefectos o Espirituales; por ejemplo, el Vicerrector, Pbro. José Guadalupe Miranda Martínez; el actual Prefecto de Estudios, Pbro. José Sánchez Montes, y los Padres Gabriel Muñoz Navarro y David Plascencia Sandoval, por citar a algunos.

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