En el repunte laical

La Acción Católica, por sus fueros
Reabre su Capilla con abierta convocatoria

Institución Benemérita de la Iglesia desde tiempos del Papa Pío XI, llegó a ser eje y médula del apostolado seglar durante muchos decenios, y ahora intenta adaptarse a la Nueva Evangelización en su ardor y en sus métodos.

La Casa de la Acción Católica dispone de una Capilla, en la que se oficia la Santa Misa cada domingo al mediodía, con invitación extensiva a la Colonia Americana.

José de Jesús Parada Tovar
Fotos: Rebeca Ortega Camaho

Con evidente convicción, y muy resuelta en su discurso, Lupita Espinoza Íñiguez, Presidenta del Comité Diocesano de la Acción Católica en la Arquidiócesis de Guadalajara, así planteó las actuales miras: “La principal misión es evangelizar, y el Culto es una parte entre varias tareas. Nuestra formación dentro de la Acción Católica (AC) es integral, y por eso incluye la parte cultural, social, política, deportiva, etcétera. Y, dentro de la revitalización que pretendemos en nuestros programas, se contempló abrir al Culto nuestra Capilla, dedicada a los Santos y Beatos Mártires Patronos de la Acción Católica, lo cual ya hicimos desde mediados de 2014, con amplitud de convocatoria no sólo a militantes y ex socios de la AC, sino a los habitantes de la Colonia Americana”.
A excepción de algunas ocasiones especiales entre semana, de rigor se celebra la Santa Misa todos los domingos a las 12 del día. No hay propiamente un Capellán asignado, por lo que indistintamente celebran el Padre Eduardo Aguirre Solís, Asistente Eclesiástico Diocesano, o algunos Asesores de diversos Organismos de la AC, como los Padres Catarino Espinoza Íñiguez, Bernardo Santana Ramírez, Rodolfo Contreras, Mario Fernández y otros que son invitados.

ACEPTACIÓN DE LA REALIDAD,
PARA TRANSFORMARLA
“En general, los Grupos religiosos y de apostolado laical vivimos una situación crítica, y la Acción Católica no es la excepción. En efecto, tenemos poca militancia, pero nos esforzamos en marcar diferencia en la Sociedad. Un Sacerdote Asesor nos instaba a ‘ser del monte, no del montón’. A pesar de ser pocos, tenemos que ser fuertes, líderes en la Iglesia y en la Sociedad como Laicos y Ciudadanos comprometidos, y con ideas y acciones concretas”, reflexionó la dirigente diocesana, detallando que, a la fecha, la AC mantiene diferentes Organismos, operativos, en unas 80 ó 90 Parroquias de la Arquidiócesis, lo que equivale escasamente al 20% de las Comunidades.
“Una cosa es clara -añadió-: no obstante la baja membresía, la Acción Católica vive, está despierta y actuante. Siguiendo las directrices del Papa Francisco, buscamos salir a las comunidades; no quedarnos encerrados entre cuatro paredes; ir a donde no tenemos militantes y a donde los hay. Cumplimos dos y medio años en ese empeño, que antes se emprendía ocasionalmente y ahora es nuestro Proyecto: crear Grupos donde no los había.
“Además, contamos con nuestra Casa de la Acción Católica (contigua al Instituto Bíblico Católico, con entrada por la esquina de las Calles Argentina y J. Guadalupe Montenegro, Sector Juárez, Colonia Americana), donde lo tenemos todo: Capilla, Auditorio, salones para clases y charlas diversas de Formación, dormitorios (para pernoctar en Retiros, Ejercicios Espirituales o Encuentros), oficinas, canchas deportivas, con apertura a todos”, refirió Guadalupe Espinoza.

Los Mártires de la Persecución Religiosa sacrificados en Chalchihuites, Zacatecas, son los Santos Patronos Titulares de la Acción Católica a nivel nacional.

VISIÓN DESDE LA EXPERIENCIA
Desde la óptica y la inserción en la Acción Católica por varias décadas, el Arquitecto Ricardo Gánem Gánem, asentó: “Porque somos una Organización con estructura nacional, mantenemos la premisa de la formación cristiana de los militantes. A partir de la Jerarquía, la Comisión de Laicos ha venido a cubrir un tanto esas funciones, pero nosotros somos parte muy activa de dicha Comisión en cuanto a la Formación Integral de los Seglares. En agosto del año reciente, por ejemplo, se diplomaron 124 Laicos en toda la Arquidiócesis, y una de las cuatro sedes fue precisamente la Casa de la Acción Católica”.
E insistió en las favorables condiciones: “Poseemos una Casa de pródiga y ventajosa ubicación; estratégica por céntrica. Incluso, por su amplitud y buena comunicación, recibe a otros Organismos que aquí sesionan o efectúan Encuentros. Ello quiere decir que estamos vinculados con la acción diocesana de apostolado, y que, a la vez que respaldamos, nos enriquecemos con otras enseñanzas y testimonios”.
Detalló que los Diplomados que se imparten, miran hacia la preparación de acción pastoral de los Laicos de manera organizada y con fórmulas dinámicas, en sintonía con los criterios del Sexto Plan Diocesano de Pastoral.

LAS VERTIENTES
Hoy en día, la AC en la Arquidiócesis tapatía funciona a través de la Unión Femenina Católica Mexicana, UFCM, que agrupa a señoras y a señoritas mayores de 35 años, y que preside la Sra. María de la Paz Beltrán. Es la más numerosa en socias registradas.
La Unión de Católicos Mexicanos, UCM, la encabeza el Sr. Martín Don, e incorpora a padres de familia varones o a solteros mayores de 35 años. La Juventud Católica Femenina Mexicana, JCFM, asocia a mujeres jóvenes, célibes, hasta los 35 años, y es liderada por la Srita. Ana Flores.
La Asociación Católica de la Juventud Mexicana, ACJM, admite como miembros a jóvenes varones menores de 35 años, y tiene como Presidente a Pedro Omar Bautista. La Asociación Católica de Adolescentes y Niños, ACAN, la coordina María Julia Abundis. El Movimiento de Enfermeras de Acción Católica, MEAC, lo abandera Margarita Ortiz.
Adicionalmente, se trabaja en constituir el Movimiento Rural de Acción Católica, bajo la eventual conducción de Lupita Espinoza, “que buscará asentarse en zonas campesinas, aunque en la Zona Metropolitana y Ciudades Medias nos abocaremos a tareas de promoción de la Ecología y el mejoramiento del Medio Ambiente, a través de la enseñanza de la creación y mantenimiento de huertos urbanos y familiares en jardines, cocheras, azoteas y macetas. Por ejemplo, en esta Casa de la AC destinamos 30 metros cuadrados a esos fines, y ya hemos cultivado y cosechado jitomate, calabacita, cilantro, cebolla, rábano y pepino”, detalló la iniciadora de este Movimiento.

Reliquias de primer grado de los Beatos Mártires jaliscienses son expuestas a la veneración pública como Patronos de la Acción Católica Mexicana.

DESDE “EL CORAZÓN DE LA IGLESIA”
Cabe ilustrar que en los inicios del siglo inmediato anterior, y hasta la década de los 70s, aproximadamente, en la Facultad de Teología del Seminario Diocesano, dentro del curriculum académico, se impartían Cursos y Talleres de Acción Católica a los alumnos avanzados.
…¿Y ahora?… “Seguiremos buscando oportunidades de intervenir en el Seminario por la vía de pláticas formales de información y orientación para dar a conocer la Acción Católica entre los Seminaristas, pues hace más de cuatro años que no se imparten”, externó Ricardo Gánem, integrante del Comité Diocesano de la AC.
A su vez, María Guadalupe Espinoza concluyó: “Existen contactos con los Padres Formadores del Seminario con ese propósito, pero intentaremos incidir más extensamente en el Presbiterio por conducto de la Comisión de Formación Permanente del Clero. De igual manera, queremos llegar a través de las estructuras y organigramas de los Decanatos, como ya lo hemos hecho inicialmente en alguno de la Periferia Norponiente”.

María Guadalupe Espinoza Íñiguez, Presidenta Diocesana de la Acción Católica, quien proyecta la expansión hacia los ámbitos rurales.

LOS PATRONOS
Son considerados Patronos de la Acción Católica Mexicana los Santos Mártires David Roldán Lara, Manuel Morales y Salvador Lara Puente, Laicos militantes de la ACJM, así como su Asesor, el Santo Sacerdote Luis Batis Sáinz; todos ellos sacrificados durante la Persecución Religiosa, el 15 de agosto de 1926, en Chalchihuites, Zacatecas. Asimismo, se les aclama como Patronos a los Beatos Mártires, Laicos, Anacleto González Flores, Ezequiel y Salvador Huerta Gutiérrez, Jorge y Ramón Vargas González, Luis Magaña Servín, Luis Padilla Gómez y Miguel Gómez Loza.
De todos ellos se conservan partículas óseas, que se exponen a la veneración pública en un Relicario, como reliquias de primer grado, en la Capilla de la Acción Católica.