Comicios: “reelecciones” en Brasil y Bolivia

Candidatos, Procesos, Partidos

*Brasil es una República Federal con Presidente-a y Vicepresidente-a, elegidos este mandato 2014 para el período 2015-20. El Mandatario es Jefe de Estado y Jefe de Gobierno a la vez, con un Congreso Nacional Bicameral, y los Tribunales Superiores de Justicia y Electoral.

*Bolivia, a su vez, es un Estado Plurinacional con Presidente y Vicepresidente, elegidos por sufragio universal obligatorio, directo y libre, para un período de cinco años. Pueden ser reelectos por una sola vez (N.B. ¿Por qué ahora es por segunda vez con Evo Morales Ayma?), con un Órgano Legislativo en la Asamblea Legislativa Plurinacional con dos Cámaras y Tribunales” (Cfr. Fuentes formales de Gobierno, 2014).

La longitud excepcional de este párrafo inicial tiene su razón de ser: explica el tema de esta Bitácora y los puntos que queremos resaltar para ahondar en el fenómeno de estas re-elecciones presidenciales casi paralelas: en Brasil y en Bolivia en este mes de noviembre con vistas al período 2025-20. Cada país tiene un perfil muy ‘sui géneris’ peculiar. De ahí también lo interesante de los procesos y las normas legislativo-electorales con que se han realizado. Cumplamos el propósito de nuestra Bitácora.



I- EL CASO DE BRASIL: ELECCIONES CON

SÚBITO CAMBIO DE RUMBO

En el anterior mes de octubre, cuando ya parecía que la carrera presidencial se definiría entre dos mujeres de recio perfil: la actual Presidenta Dilma Roussef por el Partido de los Trabajadores PSDB, y la candidata Marina Silva, del Partido Socialista Brasileñ, *PSB, convertida en tal sorpresivamente, debido a la muerte prematura, en accidente de aviación, de Eduardo Campos, líder carismático, y quien ya había generado gran empatía, ante ese escenario electoral, frente a una competitiva segunda vuelta en el horizonte, se levantó (más bien resurgió, a juicio nuestro), la figura de Aecio Neves, líder opositor de antaño, quien alcanzó el 34% de votantes según el Tribunal Superior Electoral.

La Señora Dilma ya había alcanzado un 42%, y la Señora Marina Silva se relegó con un 21%, ya eliminada. En la elección competían también el Partido Social, de centro, que por cierto llegó a promover un nuevo modelo económico hasta con privatizaciones. Estamos conscientes de las previas ventajas de Dilma Roussef y su liderazgo en la intención de voto hasta de un 49%, a pesar de los avatares acarreados por el reciente Mundial de Futbol.

II- EL CASO DE BOLIVIA ANTE UN POSIBLE TERCER MANDATO DE EVO MORALES

Es indudable que, a mediados de octubre, el Presidente Juan Evo Morales, por los sondeos a pie de urna, ganaría por amplio margen un tercer mandato. Los muestreos de ‘Ipsos’ en el Canal de Televisión ATB le fueron así noticiando, y el 60% que indicaban, auguraba su triunfo, aun en el Departamento de Santa Cruz ‘por primera vez en la historia electoral’, pese a ser una Región tradicionalmente opositora y aun autonomista. Otro rasgo típico en Bolivia es que los resultados de los sondeos a pie de urna y por conteo rápido siempre coinciden con los datos oficiales difundidos por el TSE tras el escrutinio oficial.

Por cierto que los porcentajes previos de Red UNIO y United, coincidían; a saber: Evo, el Mandatario actual, un 61%. Doria Medina, opositor claro, un 24%. El ex Presidente Jorge Quiroga (2001-2002), un 9.6%, y aun el líder indígena Fernando Vargas habría alcanzado un 3%. (N.B. Por cierto, el porcentaje de indígenas quechuas es un 31%, y el de aimaraes suma un 25 % del Censo Nacional, en la composición étnica de Bolivia. Y esto, en cifras de 2014. El augurio ha favorecido siempre a Morales Ayma en su persona, mas no “a sus malos y corruptos colaboradores”, se decía al acabar de votar.

Dos contextos electorales de obligada consignación. Ratificaremos resultados definitivos.