EPIGRAMARIO

El Juglarón Arrimado

Peña Nieto en Alemania,
Sandoval en Tierra Santa
y Alfaro en Yankilandia.

¡Ahí la llevan, gobernantes,
a viajar con comitivas!
Gastalones y paseantes
son ahora “fuerzas vivas”.

Se largan como si nada,
satisfaciendo sus ocios.
Y, mientras hacen negocios,
todo aquí, de la patada.

Por ejemplo el triste caso
de los desaparecidos,
que les vale un cacahuate.

Suman miles secuestrados
en Jalisco y en la Nación,
y en común aumentan grados
de injusticia y corrupción.

Ni la zozobra ni el llanto
de infinidad de parientes,
ni los reclamos ingentes
atenúan tal desencanto.

Capital de la República
se asfixia sin remedio,
por más que sea un Estado.

¿A quién se le ocurrió, hombre,
cambiarle al DF identidad?
No sirvió mudarle nombre
por el de México Ciudad.

Ya no aguantan la polución
por su macro hacinamiento.
Eso suena a un escarmiento
por no controlar expansión.

La capital de Jalisco
no canta mal las rancheras
y sufre contaminación.

“¿Guadalajara en un llano,
México en una laguna?”.
Parece canción de cuna,
del Siglo Dieciocho, de plano.

Del vecino están cortando
ya las barbas y el bigote,
y cuenta nos vamos dando
que el asunto no es borlote.