III Sínodo Extraordinario de Obispos
La Familia en el mundo, a estudio
Mónica Livier Alcalá Gómez
“¿Para caminar se necesitan los dos pies? Pues bien, para avanzar solamente se levanta un pie cuando se tiene la certeza de que el otro está bien firme en el suelo. Esto es, a mi entender, el modo de proceder del Sínodo. Avanzar y descubrir nuevas formas y experiencias sin abandonar nada de lo cierto, seguro y válido”. Así explicaba el Cardenal Lorenzo Baldisseri, Secretario General del Sínodo de los Obispos, en una entrevista concedida a “L’Osservatore Romano” el 11 de julio, la manera de proceder en vistas al Sínodo, a la luz del Instrumentum laboris.
Este Instrumentum, que será la base para los trabajos del Sínodo, añadió el Cardenal, “no es un Documento del Magisterio de la Iglesia, una exposición doctrinal o pastoral del tema en cuestión, sino que constituye la síntesis elaborada a partir de los datos, informaciones, sugerencias, experiencias vividas, individuales, comunitarias, pastorales, de la realidad objetiva de la Familia hoy en día, con sus luces y sombras.
“La elaboración presenta el estatus actual de la Familia en sus múltiples aspectos, que estarán ulteriormente integrados en la segunda etapa del Programa sinodal, que concluirá con la Asamblea General Ordinaria de 2015. “A los Padres Sinodales les espera -concluyó- examinar, estudiar, confrontar esta realidad y contrastarla con las enseñanzas y la disciplina de la Iglesia que, dicho sea de paso, están bien detalladas en la primera parte del Documento, e indicar luego nuevas o renovadas vías pastorales para responder a los desafíos señalados”.
Entonces, ¿sobre qué se hablará en el Sínodo?
En el Documento preparatorio para este III Sínodo Extraordinario se afirma la intención del Papa al convocar a la reflexión en torno a la Familia, lo cual se debe a que, “en el tiempo que estamos viviendo, la evidente crisis social y espiritual ha llegado a ser un desafío pastoral que interpela la misión evangelizadora de la Iglesia para la Familia, núcleo vital de la Sociedad y de la comunidad eclesial”.
Así pues, se ha establecido un itinerario en dos etapas:
1. La Asamblea Extraordinaria de este año, que se enfocará en delinear cómo se encuentra la situación de la Familia en el mundo, para luego recoger los testimonios y propuestas de los Obispos.
2. La segunda parte será la Asamblea General Ordinaria de 2015, en la que se buscarán líneas operativas para la Pastoral de la Persona Humana y de la Familia.
Con este Documento, a cada Diócesis del mundo se envió un Cuestionario que, a su vez, tuvieron que regresar para que la Comisión encargada del Sínodo creara, posteriormente, el Instrumento de Trabajo.
Estos fueron los temas que comprendió dicho Cuestionario:
• Sobre la difusión de la Sagrada Escritura y del Magisterio de la Iglesia en relación a la Familia.
• Sobre el Matrimonio, según la Ley Natural.
• La Pastoral de la Familia en el contexto de la Evangelización.
• Sobre la Pastoral para afrontar algunas situaciones matrimoniales difíciles.
• Sobre las uniones de personas del mismo sexo.
• Sobre la educación de los hijos en las situaciones matrimoniales irregulares.
• Sobre la apertura de los cónyuges a la vida.
• Sobre la relación que existe entre la Familia y la Persona.
• Otros desafíos y propuestas.
En Guadalajara se trabaja intensamente
Durante los meses de octubre, noviembre y diciembre de 2013, el Asesor de la Pastoral Familiar, Presbítero Eduardo Pajarito González, Vicario Parroquial de Getsemaní de la Cruz, coordinó la aplicación de una Encuesta para tratar de resolver las interrogantes que el Documento preparatorio del Sínodo planteaba. El vaciado se envió, como exigía el proceso, a la Conferencia del Episcopado Mexicano, la cual, a su vez, hizo un vaciado con los resultados recabados de cada Diócesis, Arquidiócesis y Prelaturas de México.
“Me tocó recabar la Encuesta que, en general, era muy interesante, y viendo las preguntas nos dimos cuenta de que la problemática es igual en todo el mundo, aunque con diferentes tintes y matices desde las Parroquias de la ciudad, las de la periferia, las foráneas; las de México, Centroamérica y Sudamérica”.
En general, el Padre Pajarito González asentó que se ha visto que en lo que debe trabajarse es en la prevención, en la formación y capitación de los jóvenes, porque los conflictos, ya en los matrimonios, se presentan como problemas muy fuertes, que en muchos ejemplos ya no tienen solución, como por ejemplo los casos de infidelidad, de violencia, etc. “Entonces, lo que debe hacerse es preparar al joven y al adolescente con formación en el noviazgo para el matrimonio, porque desde esa etapa tiene que conocer las responsabilidades que conllevará el ser padre de familia, además de que tiene que procurarse el acompañamiento para los primeros años de matrimonio, a fin de poder ayudar a la pareja a solucionar sus problemas.
“Con las conclusiones del Sínodo Extraordinario se esperan nuevas pautas y directrices que van a ir marcando el rumbo concreto de la Pastoral Familiar aquí en Guadalajara, pero ese Documento lo tendremos hasta 2015”.
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